En una iglesia pueblerina, el sacerdote a cargo y su asistente están ya muy viejos y cierran el orfanato para hijos de madres que emigran para trabajar. Poco después mueren, y el sacristán Pancho se va a la capital, donde la prostituta Rosa, madre de uno de los pequeños de la casa hogar, lo toma como su protector y se enamora de él cuando descubre que tiene un miembro sexual descomunal.