Joven, hermoso e inteligente, Trevor se encuentra en un punto muerto. Enredado en una relación enfermiza con Darrell, un adicto a la heroína auto-destructivo, y atrapado en un trabajo de telemarketing, Trevor encuentra escaso consuelo en el insulso Los Ángeles. Además, él y sus dos mejores amigos -su compañera de piso, Andie; y Jake, un joven cantante- se están separando por el aburrimiento y el descontento. En una visita al hospital debido a una sobredosis de su último novio, Trevor descubre un nuevo comienzo potencial en Ephram, un médico interno con ambición, una actitud cálida y muy elegante. Después de pasar una noche romántica juntos, Trevor parece que va a hacer algunos cambios. Comienza poniendo fin a su relación con Darrell, y luego se esfuerza para volver a conectar con Andie y Jake. Pero lo que debería ser un acontecimiento feliz -una fiesta para celebrar una prueba negativa de VIH- estalla en ira y dolor.