En Lake Forrest (Illinois) la gente no deja de murmurar: dicen que la joven viuda Jessica Drummond (Barbara Stanwyck) anda en amoríos – demasiado pronto – con un apuesto oficial del ejército (George Brent). Las habladurías han llegado hasta Jessica y, por desgracia, también hasta sus dos hijos, pequeños e impresionables.